domingo, 4 de febrero de 2018

Nunca sabrás,
no te imaginas,
que alguien te cuida.
Desde la distancia.
Observando tu zigzag
entre la gente
como si de una canción de Pol 3.14
te hubieses escapado.
Sin dejarse ver,
tu ángel de la guarda
siempre está pendiente,
de si te vas a caer
o sigues siendo
un ratito más fuerte.
Quizás para ti
lo mejor es no verle sonreír.
Pero luego llegas,
y me dices que quieres recorrer Madrid, que quieres patinar en Navidad
y viajar en primavera,
que para que voy a poner la calefacción
si tú ya me das calor;
que echarás de menos las ramblas,
pero que prefieres ver el retiro conmigo.
y,
causas una explosión en mi cabeza, 
mientras nieva,
y llega el 4 de Febrero.
Y no soy capaz de ir a verte.
Y esque me hielo por dentro.
Y prefiero quedarme aquí.